Cuando se trata de compartir alimentos con nuestros perros, una de las preguntas más comunes es: ¿Pueden los perros comer queso? Este alimento es sabroso y está presente en muchas cocinas, pero no todos los alimentos que disfrutamos los humanos son seguros para nuestros compañeros caninos. En este artículo actualizado al 2024, te explicaremos si el queso es adecuado para los perros, qué tipos de queso son más seguros y cuáles debes evitar, así como las consideraciones de salud relacionadas.
¿Es seguro que los perros coman queso?
Sí, los perros pueden comer queso en cantidades moderadas, pero hay varios factores a considerar antes de ofrecer este alimento a tu perro. Aunque el queso no es tóxico para los perros, hay algunos perros que pueden experimentar problemas digestivos o de salud si consumen cantidades excesivas o ciertos tipos de queso.
1. Contenido de lactosa
El queso es un producto lácteo, lo que significa que contiene lactosa. Los perros, al igual que muchas personas, pueden ser intolerantes a la lactosa. A medida que envejecen, muchos perros producen menos lactasa, la enzima necesaria para digerir la lactosa. Como resultado, algunos perros pueden experimentar malestar estomacal, diarrea o gases después de consumir productos lácteos, incluido el queso.
2. Alto contenido en grasas
El queso puede ser alto en grasas, lo que podría llevar a problemas de sobrepeso o pancreatitis si se alimenta en exceso a los perros. La pancreatitis es una inflamación del páncreas que puede ser muy dolorosa y, en casos graves, poner en peligro la vida del animal.
3. Sodio y conservantes
Algunos tipos de queso tienen un alto contenido de sodio o contienen conservantes, lo que puede ser peligroso para los perros si se consumen en grandes cantidades. El exceso de sodio puede provocar intoxicación por sal, con síntomas que incluyen vómitos, diarrea, letargo y convulsiones.
Tipos de queso que los perros pueden comer
Si decides darle queso a tu perro como premio o para esconder algún medicamento, es importante elegir variedades que sean bajas en lactosa, sodio y grasas. A continuación, te mostramos algunos tipos de queso que suelen ser más seguros:
1. Queso bajo en grasa
Los quesos bajos en grasa, como el queso cottage o el queso ricotta bajo en grasa, son opciones más saludables para los perros, ya que contienen menos calorías y grasas que los quesos tradicionales.
- Queso cottage: Este queso es suave y fácil de digerir para muchos perros. También es relativamente bajo en grasa y sodio, lo que lo convierte en una opción popular para perros que necesitan controlar su peso.
- Queso ricotta: Aunque contiene un poco más de grasa que el queso cottage, sigue siendo una opción con un contenido de grasa moderado, especialmente en su versión baja en grasa.
2. Queso mozzarella
La mozzarella es otro queso relativamente bajo en grasa y sal. Esto lo convierte en una opción más segura para los perros, siempre que se ofrezca en pequeñas cantidades. La mozzarella tiene una textura suave y es fácil de cortar en trozos pequeños para dar como premio.
3. Queso suizo
El queso suizo tiene un bajo contenido de sodio en comparación con otros quesos, lo que lo convierte en una opción más segura para los perros. Sin embargo, aún debe ser administrado con moderación, ya que puede ser alto en grasas.
4. Queso cheddar
El queso cheddar es una opción común, pero debe ofrecerse con cuidado. Aunque muchos perros pueden comer cheddar sin problemas, es más alto en grasas que otros tipos de queso. Las versiones de cheddar bajo en grasa son una mejor opción.
Tipos de queso que debes evitar
No todos los tipos de queso son seguros para los perros. Algunos pueden ser demasiado altos en grasas, contener ingredientes peligrosos o causar problemas digestivos. Evita ofrecer los siguientes tipos de queso a tu perro:
1. Quesos con aditivos
Evita los quesos que contengan aditivos como cebolla, ajo, hierbas o especias, ya que algunos de estos ingredientes pueden ser tóxicos para los perros. Por ejemplo, el ajo y la cebolla pueden dañar los glóbulos rojos de los perros, lo que puede llevar a la anemia.
2. Quesos azules
Los quesos con moho, como el queso azul, el Roquefort o el Gorgonzola, deben evitarse por completo. Estos quesos pueden contener hongos que producen toxinas llamadas roquefortina C, que pueden causar vómitos, diarrea y, en casos graves, convulsiones en los perros.
3. Queso cremoso o procesado
El queso procesado o cremoso, como el queso para untar o los quesos envasados con sabor artificial, suele tener un alto contenido de sodio, conservantes y otros aditivos que no son saludables para los perros. Estos quesos deben evitarse.
¿Cómo ofrecer queso a tu perro de manera segura?
Si decides darle queso a tu perro, aquí tienes algunas recomendaciones para hacerlo de forma segura:
1. Moderación
El queso debe darse como un premio ocasional y no como parte de la dieta diaria de tu perro. Ofrecer pequeñas cantidades de queso es suficiente para evitar problemas digestivos o un aumento de peso innecesario.
2. Consulta con tu veterinario
Si no estás seguro de si tu perro puede tolerar el queso o si tiene algún problema de salud que pueda complicarse con el consumo de productos lácteos, siempre es mejor consultar con un veterinario antes de ofrecerle este alimento.
3. Usar queso como herramienta
El queso puede ser útil para administrar medicamentos a los perros. Si tu perro es reacio a tomar pastillas, puedes esconderlas en un trozo pequeño de queso blando para que sea más fácil dárselo sin que lo note.
¿Qué hacer si tu perro come demasiado queso?
Si tu perro consume una cantidad excesiva de queso, es posible que muestre algunos de los siguientes síntomas:
- Malestar estomacal (diarrea o vómitos)
- Gases
- Letargo
- Dolor abdominal
Si notas alguno de estos síntomas después de que tu perro haya comido queso, lo mejor es dejar que el malestar pase naturalmente. Asegúrate de que tu perro tenga acceso a agua fresca en todo momento. Si los síntomas persisten o empeoran, es importante contactar a tu veterinario para recibir orientación profesional.